En el otro lado de la cerca, haciéndose visera con las manos, las mujeres también seguían atentamente las evoluciones del avión con una quietud que oprimía el corazón. Hasta ese momento nunca había visto tanta tristeza junta (o es creía en aquel momento; ahora me parecen más tristes algunas mañanas de mi infancia que aquel atardecer perdido de 1973). -Bolaño
Estrella distante es la historia de un impostor. Carlos Wieder, brutal piloto, se adivina en la figura de Alberto Ruiz Tagle: aquel seductor del departamento amputado, visto por vez primera en tiempos de allende, frecuentando los círculos de jóvenes poetas (siempre despertando su desconfianza y envidia).
Después aparece Wieder, montado en la avioneta con que estampa en el cielo las palabras: la muerte es amistad / la muerte es chile / la muerte es responsabilidad / la muerte es mi corazón : toma mi corazón. Y sí: sus piruetas marcan el ritmo de la muerte. Exhibe también fotografías de desaparecidos, torturados, atroces centímetros cuadrados en que se retrata todo el horror de la dictadura. Y al minuto siguiente se ha marchado, en una desaparición que en algo recuerda a la de Tinajero o Raiter. Su pista se encuentra años después en revistas de literatura europeas. Los temas: satanismo, nacionalsocialismo, fascismo y literatura de vanguardia. Decir más lo arruinaría todo.
Me he dado por vencida en la labor de recomendar a Bolaño. No sé si su literatura es “auténticamente latinoamericana” y no me interesa discutir con personas cuyo argumento para rechazarlo es que “está de moda”. Lo que sí sé es que leerlo me resulta placentero, y no tengo muy claro qué más puede pedirse de un libro.
Café soluble 